Afirman semáforos no resisten un huracán

La empresa de señalización de Semáforos Internacionales del Caribe (Semaforinsa) advirtió que el 80 por ciento de los semáforos instalados en el país no soportarían un ciclón y que una evidencia es que con las últimas lluvias y por falta de mantenimiento ese sistema de señalización prácticamente colapsó. “Estamos seguros de que no se han tomado las previsiones en este país para el caso de un ciclón”, explicaron el presidente de Semaforinsa, Nelson Rivera y su socio Newton Rodríguez.

Agregaron que “con nuestra experiencia y observaciones les aseguramos que quedará más de un 80 por ciento colapsado y por su condición de liviano volarán como chichiguas ocasionando pérdidas materiales y lesiones”.

Los expertos aseguraron que los semáforos de plástico están prohibidos en Estados Unidos luego del huracán Andrew, en 1992, porque provocaron heridas a múltiples personas cuando salieron disparados por los fuertes vientos.

Detallaron que el sol reseca los plásticos, por lo cual se rompe con la brisa. “Los cruces peatonales ya prácticamente sólo quedan los pedestales”, puntualizó Rivera tras asegurar que los semáforos de metal inoxidable no sufrieron daños con las pasadas lluvias y vientos.

Caos tránsito

En visita a la redacción de El Nacional, Rodríguez y Rivera también se refirieron al caos del tránsito en el Distrito Nacional que a su juicio se debe al incumplimiento y tolerancia de las autoridades y la falta de educación de los choferes.

Rodríguez lamentó que los agentes de la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMET) en los momentos de congestión vehicular se preocupen más de poner multas que por viabilizar el tránsito.

Dijo que también afecta al tránsito los badenes y reductores de velocidad (policías acostados), además del daño que causan a los vehículos. También se quejó de que los ayuntamientos prohíban el parqueo en determinadas zonas sin primero ubicar un parqueo, sea gratuito o con el pago de una mínima cuota.

Aseguró que el estrés que provocan los largos tapones afectan cada día más la salud de las personas, provocando una alta incidencia en el alta presión arterial e infartos. Rodríguez sostuvo una de las principales razones para buscarle una solución al caos del tránsito es que si se agiliza, la población ahorrar en combustible y en mantenimiento de los vehículos.