Decenas de organizaciones se manifestaron en diferentes intersecciones y plazas del Gran Santo Domingo y otras provincias, en rechazo a la propuesta de reforma fiscal enviada por el Gobierno al Congreso Nacional, en el denominado “Martes de Luto”.
Vistiendo prendas oscuras y con pancartas que reclaman cárcel para los corruptos, los protestantes exigieron un cambio de rumbo en la política económica del Estado, tomando como punto de partida un ahorro en el gasto y evitar el dispendio de los fondos públicos.
Alianza País, una de las organizaciones convocantes, que estuvo apostada en el parque La Lira, en la avenida Abraham Lincoln y Lope de Vega, indicó que el país está frente al déficit más grande de la historia e insistió en que Danilo Medina es un presidente atrapado en las redes de intereses que lo llevaron al poder. Aseguró que el “paquetazo” tributario va a significar mayor desempleo y peor calidad de vida.
En tanto, en la avenida México, frente al Palacio Nacional, el Movimiento Justicia Fiscal consideró un hito en la historia dominicana que se hayan unido los sectores empresariales, laborales y sociales para reclamar al Gobierno el recorte de los gastos, pero lamentó que la respuesta del Estado no fuera la apropiada al cortar el diálogo con el Consejo Económico y Social.
Propusieron un recorte drástico del presupuesto y retrotraer el renglón de gastos al que se tenía en el 2011, ya que, afirman, no estaba distorsionado por el efecto de la campaña electoral, como sucedió con el del 2012. Además, sugieren retomar el diálogo y no abrigarse en la imposición que da la mayoría mecánica que tiene el Gobierno en el Congreso Nacional.
Indicaron que luchan por un pacto fiscal justo a mediano y largo plazos que transforme la estructura fiscal y mejore la calidad del gasto, orientándolo a las necesidades colectivas.
Dijeron que la reforma debe ser producto de un amplio proceso de concertaciones entre los diversos sectores, con el objetivo de establecer una estructura tributaria eficiente que reduzca la evasión y asegure los recursos necesarios para saldar la deuda social y enfrentar la pobreza.
Una presencia policial, esencialmente femenina, fue visible en la manifestación, en la que se cercaba a los protestantes y los limitaba a la acera de las oficinas gubernamentales, frente al Palacio Nacional.
Entre las exigencias de las organizaciones figuran encarcelamiento a los corruptos y recuperación del dinero robado, una auditoría y renegociación de la deuda externa, la revisión del contrato con la Barrick Gold y los contratos eléctricos, la eliminación de los salarios y pensiones de lujo y las denominadas nominillas, así como de las instituciones y funciones duplicadas en el Gobierno.
Los convocantes fueron los movimientos Proyecto Zurdo, Alianza País, Justicia Fiscal, Joven Ponte en Política, Alianza por la Democracia, el Centro Bonó, Foro Ciudadano, el Centro Juan XXIII y Participación Ciudadana, entre otros.
La actividad se extendió por otras provincias. En Santiago se llevó a cabo un encendido de velas.
La clave
1. El mimo
Sin palabras y con su cara triste, el mimo eleva una pancarta que indica su rechazo a la propuesta.
2. Los jóvenes
Adolescentes de ambos sexos dijeron presente e insistieron en que se integran al reclamo porque son el futuro de la Nación.
3. Razones
Los manifestantes coinciden en que el déficit fiscal es consecuencia del mal uso de los fondos públicos y exigen al Gobierno una mejor inversión del gasto.
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