Las promesas realizadas no se han traducido todavía en fondos adicionales que permitan pasar a una velocidad superior y cubrir de manera adecuada los grandes programas de reconstrucción que están a la espera de financiación, alertó en la tribuna de la ONU el primer ministro de Haití, Jean Max Bellerive.
Las aportaciones de las ONGs son “indispensable y bienvenidas, pero no pueden ser eternas ni sustituir al Estado, cuya credibilidad está en juego, así como la eficacia de las instituciones”, señaló en su intervención en la Cumbre de la ONU sobre los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM).
Bellerive dijo que es “extremadamente difícil” para su Gobierno conocer los montos reales a disposición de las agencias de desarrollo y los fondos de la comunidad internacional destinados a Haití.
Haití, dijo, “puede y debe cambiar su imagen de país inestable y sin dirección” y será ejemplo de la capacidad de la comunidad internacional de cumplir sus promesas.
El enviado especial de la ONU para Haití, Bill Clinton, y una decena de ministros de Asuntos Exteriores se reunieron el lunes en Nueva York para evaluar la asistencia comprometida en favor de Haití y en el encuentro se anunciaron fondos adicionales para proyectos concretos.
La comunidad internacional de donantes acordó en pasado marzo entregar 5, 000 millones de dólares para reconstruir el país.
Contra el capitalismo
Cuba, Venezuela y Nicaragua la emprendieron contra el capitalismo ayer y dijeron que resulta difícil combatir la pobreza mientras siga habiendo una concentración de la riqueza como la que se registra actualmente.
Los tres países hicieron presentaciones similares en la cumbre de las Naciones Unidas sobre la pobreza y dijeron que la codicia de los ricos hace peligrar el cumplimiento de los Objetivos del Desarrollo del Milenio (ODM) que se fijó la comunidad internacional hace una década.
El embajador venezolano ante la ONU Jorge Valero sostuvo que “a diez años de la aprobación de los ODM, el balance es desalentador.
MORALES LA EMPRENDE CONTRA LA USAID
El dinero de Estados Unidos no debería servir para conspirar contra otros presidentes, dijo ayer martes el presidente boliviano Evo Morales en referencia a la agencia de Estados Unidos para el desarrollo (USAID), a la que acusa de actuar contra Bolivia.
Morales dijo durante una rueda de prensa en la sede de Naciones Unidas que quiere “mejorar las relaciones” con Estados Unidos y “no llegar” a una situación de expulsión de la organización de Bolivia “El pueblo de Estados Unidos debería controlar a su presidente y que la plata de Estados Unidos no esté financiando para conspirar contra presidentes”, dijo Morales cuando fue preguntado por la Agencia para el Desarrollo Internacional, o USAID. Hace unos meses, alcaldes del pequeño departamento de Pando, en el noreste del país, decidieron expulsar a varias ONG que financia USAID por una supuesta injerencia con fines “desestabilizadores”.
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